El Grupo Social ONCE aborda “El impacto de la interculturalidad en las Organizaciones”
Durante un seminario del Observatorio de Igualdad de Oportunidades
El Observatorio de Igualdad de Oportunidades del Grupo Social ONCE ha analizado “El impacto de la interculturalidad en las Organizaciones”, durante la celebración, el día 26 de junio, de un nuevo seminario online bajo este mismo título. Para ello, han participado representantes de Accem y se ha mostrado el ejemplo de tres personas con discapacidad migrantes que trabajan en el Grupo Social ONCE.
Para abordar esta temática, que ya forma parte de la realidad de la mayoría de las empresas y entidades españolas, en el seminario han participado Enrique Barbero Rodríguez, director general de Accem, y Nuria Fernández Roma, responsable del Área de Campañas y Comunicación y experta en RSC·RSE, de la misma organización. Accem es una ONG que trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas refugiadas y migrantes o colectivos más vulnerables.
Durante la apertura del seminario, la vicepresidenta de Igualdad, Recursos Humanos y Cultura Institucional, e Inclusión Digital, del Grupo Social ONCE y presidenta del Observatorio, Patricia Sanz, hacía referencia a que “somos una sociedad cada vez más plural, y el Grupo Social ONCE es un reflejo de ella, con una pluralidad también creciente”. En este sentido, el Observatorio se planteó la necesidad de avanzar en sus estudios sobre diversidad, más allá de los ya realizados sobre la igualdad con perspectiva de género, siempre teniendo en cuenta la variable de la discapacidad.
Así, explicaba Sanz, se contemplaron otros tres tipos de diversidad, en función de los tres pilares fundamentales en los que se apoya el Observatorio: el del colectivo LGTBI, con presencia, por supuesto, en la plantilla; la diversidad generacional, ya que en el Grupo Social ONCE conviven cinco generaciones diferentes; y la diversidad cultural, tema central del seminario. “No solo queremos resaltar las diferentes nacionalidades que conviven en nuestra plantilla, sino que queremos poner de relieve que, si para las personas con discapacidad es más difícil encontrar un empleo, cuando a esa distinta nacionalidad le sumamos la discapacidad, el muro que se levanta es tan alto, que a veces resulta difícil de superar. Y ahí el Grupo Social ONCE está para ofrecer diferentes oportunidades”, aseguraba la vicepresidenta.
La labor necesaria de Accem
Desde Accem, su director general ofreció los datos básicos de la Organización. Nació en 1951, al hilo de la Convención de Ginebra, dentro de la Conferencia Episcopal, con la misión fundamental de acompañar a los españoles que migraban, fundamentalmente a Europa. En 1991, se convierte en una asociación civil, donde sigue trabajando con personas migrantes y refugiadas, su tronco de acción. En 2002, con la crisis económica, se amplía la atención a personas en riesgo de exclusión social (mayores, menores, personas sin hogar...).
Por su parte, la exposición de Nuria Fernández giró en torno a la importancia de la gestión de la diversidad cultural y el talento diverso, analizando la situación actual de las personas refugiadas, obligadas a escapar de su lugar de origen o residencia a causa de la guerra, la violencia y la persecución, y poniendo de relieve la necesaria atención que ofrecen organizaciones como Accem en el acompañamiento de estas personas para que alcancen una inclusión real en los países a los que llegan.
La realidad de Abner, Gladimar y Arif en el Grupo Social ONCE
Explicaba Patricia Sanz que “muchas personas con discapacidad de otros países llegan a España porque alguien les ha hablado de una ONCE que les puede ayudar y de un Grupo Social ONCE que les puede ofrecer un empleo, con la prioridad clara de la discapacidad”.
Este es el caso de Abner Samuel Cueva Peralta, vendedor de la ONCE en Madrid. En su intervención, Abner, procedente de Perú, contó que lleva tres años en España y entró a trabajar en la ONCE por medio de unos amigos que ya trabajaban en la Organización. Tras presentar su currículum, y el de su esposa, a través de la Agencia de Vallecas, consiguieron superar las pruebas y empezaron a trabajar como agentes vendedores hace dos años. “Yo me siento feliz trabajando en la ONCE como vendedor, la adaptación fue fácil gracias al hecho de compartir el idioma y al apoyo continuo que nos dan”, asegura Abner. “En mis objetivos, voy a seguir luchando por dar más de mí en mi puesto de ventas, con mis clientes, por los que cada día me siento más querido”, añade.
Otro ejemplo, es el de Gladimar Chávez Afonso, trabajadora de Fundación ONCE, y participante también en el seminario. Glady, de padres canarios emigrados, nació en Venezuela con una discapacidad física y llegó a España en 2018. Su primer destino fue Tenerife, donde comenzó el proceso de solicitud del certificado de discapacidad, y su formación en diferentes áreas como complemento a sus estudios. Su reconocimiento de discapacidad llegó en 2021, y “lo primero que hice fue ir a hablar con la ONCE, con el objetivo de entrar a vender”, cuenta. Pero llegué a la Fundación ONCE a presentar mi currículum, y ahí conocí a la gente de Inserta Empleo, “pregunté por otros puestos de trabajo, más dentro del ámbito administrativo que se adaptaran a mi experiencia profesional y a mi perfil, y ahí me presentaron la oferta de empleo en Por Talento Digital, donde estoy ahora”, explica. “Trabajar en Fundación ONCE para mí ha sido una experiencia increíble, ya que he visto cómo realmente se ayuda a la gente con discapacidad a formarse, a trabajar y conseguir salir adelante”, añade.
Y, desde Ilunion, Mohammed Arif Mirzad, contaba también su experiencia con el Grupo Social ONCE. Arif, con discapacidad física, llegó a Madrid en 2021 desde Afganistán. En 2022 realizó un curso de robótica a través del Ayuntamiento de Madrid, y en 2023 se encuentra con una oferta de empleo de Ilunion para un puesto de agente de reservas con discapacidad; se presenta y consigue el empleo en el mes de febrero. “Desde el primer día he sentido que es un sitio muy especial y que hay gente que me va a entender. Ahora ya me siento como que estoy en mi casa, en Torre Ilunion, con mis compañeros, todos ellos con discapacidad”, afirma. Arif agradece a Ilunion “haber podido empezar una vida nueva, porque para mí era muy difícil, no entendía el idioma, por mi discapacidad no me veía con posibilidad de trabajar, y ahora ha cambiado mi vida y la de los nueve miembros de mi familia que todavía siguen en Afganistán”, dice. “Al ver los puestos de venta de la ONCE, siempre había pensado que podía trabajar en el Grupo Social ONCE, pero nunca imaginé que podría hacerlo en un puesto tan bonito en Ilunion que, como decimos, es un mundo diferente”, añade.
Como cierre del seminario, al que se conectaron 240 personas, apuntaba la presidenta del Observatorio de Igualdad de Oportunidades que “en el Grupo Social ONCE no somos los mejores y esta es una de las áreas en las que seguramente tengamos que mejorar en cuanto a la comunicación de lo que estamos haciendo y tenemos que aprender de entidades como Accem, que nos ayudan a tratar bien a las personas que llegan y a acompañarles también después de esa inserción laboral”.
Seminario “El impacto de la interculturalidad en las Organizaciones”