Accesibilidad a los contenidos
Los contenidos de los bienes y servicios, sobre todo aquellos de carácter educativo y cultural, contribuyen al aprendizaje, a la comprensión y a la generalización de conceptos. El acceso a los mismos suele realizarse a través de la visión, por lo que las barreras son muy grandes cuando se carece de este sentido o se tiene una deficiencia visual grave. Por citar un ejemplo, es imposible hacerse una idea de la grandiosidad de una catedral cuando no hay visión, aunque sí es factible comprender algunas de sus características fundamentales tocando una réplica de tamaño abarcable y accesible al tacto.
La adaptación táctil a través de réplicas, altorrelieves (mapas y gráficos táctiles) y el sistema braille de lectoescritura (libros, revistas, folletos...), la adecuación de tamaños, tipografía, contraste, iluminación, etc., así como la información sonora en los soportes adecuados, son imprescindibles para paliar las dificultades de acceso a los contenidos. Los libros y materiales didácticos, el cine, el teatro, la televisión, así como los museos, monumentos y parques naturales, deben ser totalmente accesibles para una persona con discapacidad visual.
Para más información, puede dirigirse a la Dirección de Autonomía Personal, Accesibilidad, Tecnología e Innovación: dirapati@once.es