Baleares se compromete con las personas sordociegas
Firmado con FOAPS un acuerdo para aumentar los servicios de mediación en las Islas
Un total de 25 personas con sordoceguera, certificadas por el Servicio de Atención a la dependencia de Baleares, podrán contar durante el próximo año con un mediador que les ayude a realizar actividades básicas de su vida diaria, especialmente relacionadas con su formación e inclusión laboral. Este importante avance será posible gracias al acuerdo firmado hoy por la Fundación ONCE para la Atención a Personas con Sordoceguera (FOAPS) con el Govern insular.
La consellera de Servicios Sociales y Cooperación, Fina Santiago, lo ha dado a conocer junto a la gerente de FOAPS, Esther Requena, destacando que la aportación oficial de 113.000 euros para este programa permitirá proveer los servicios necesarios, como muestra del “compromiso social de la Administración balear”.
Se calcula que se prestarán gratuitamente 5.400 horas de intervención directa, que incluyen acompañamiento en 2.700 actividades de la vida diaria, especialmente en las relacionadas con la educación y la integración laboral. El objetivo es cubrir necesidades cotidianas, como realizar compras o gestiones pero, como ha señalado Santiago, “ofreciendo prioridad a aquellas que fomenten su integración escolar y laboral”.
Un plan personalizado para cada persona sordociega
Requena, por su parte, ha explicado que se ofrecerán hasta un máximo de 15 horas semanales con “un programa hecho a medida”, valorando las posibilidades y necesidades de cada solicitante, que se sumará a las horas de mediación que ya ofrece directamente FOAPS, para contribuir al objetivo común de vencer las múltiples barreras que -ha afirmado- “impiden a las personas con sordoceguera acceder a múltiples entornos”. Esta confluencia, ha indicado Fina Santiago, “facilitará la eficacia y eficiencia del servicio y permitirá que, en muchos casos, los mediadores comunicativos sean los mismos”.
Según se ha anunciado en el acto, el Govern balear va a impulsar la formación en las Islas de técnicos mediadores a través de un grado de FP en el centro Son Llebre, de Mallorca, que intermediará también para facilitar su posterior contratación.