La ONCE cierra un acuerdo con los sindicatos para cubrir los salarios y garantizar el futuro del empleo y de la labor social
- Abono íntegro de nómina de marzo y primeros días de abril y dotación de fondos especiales para familias con problemas
- Se mantienen íntegras pagas “extra” y vacaciones, a la vez que directivos y mandos intermedios rebajan un 30% su salario
La ONCE ha cerrado un acuerdo con la totalidad de la representación legal de los trabajadores (compuesta por UTO-UGT y CCOO) para cubrir el 100% del salario de sus empleados (base, antigüedad y complementos de escala) mientras se mantenga la actual situación y garantizar el empleo cuando se levanten las medidas de seguridad tomadas por el Gobierno para superar la crisis del coronavirus.
Cierra así la negociación con los sindicatos que se inició por mandato del Consejo General de la ONCE, máximo órgano de la Organización, tras decidir la puesta en marcha de un paquete de medidas urgentes para garantizar la viabilidad de la Institución, el mantenimiento de la acción social con sus 72.000 personas ciegas afiliadas y del resto de personas con discapacidad, a través de la Fundación ONCE, así como el futuro del empleo.
La situación de caída prácticamente de un 100% de los ingresos por la suspensión de los sorteos y la retirada por primera vez en la historia –desde 1939- de sus vendedores de las calles desde el 14 de marzo, obligan a tomar medidas que garanticen la acción social centrada en lo más urgente: atención especial a las más de 14.000 personas ciegas mayores de 60 años que viven solas y requieren del apoyo de nuestros equipos de psicólogos, trabajadores sociales, técnicos, etc.; servicio a personas sordociegas; cobertura para que 7.500 estudiantes finalicen el curso, con profesores y expertos educativos volcados en su inclusión; estructura de apoyo tecnológico; o autonomía, como el perro guía; y cualesquiera que garanticen sus condiciones básicas de vida en estos momentos.
Amplio acuerdo con los sindicatos
Las negociaciones entre la empresa y la parte sindical han estado marcadas desde el inicio por una misma intención común: mantenimiento del empleo; mantenimiento de las máximas capacidades económicas y sociales para la plantilla; y la incorporación lo más ágil posible cuando se levanten las limitaciones de actividad ordenadas por el Gobierno.
Sobre esta base, se han pactado las mejores condiciones alcanzables para los trabajadores y trabajadoras afectados total o parcialmente por el expediente de regulación temporal de empleo, a quienes se compensará por parte de la empresa el 100% de su salario.
Para proteger familias con situaciones de especial dificultad y garantizar cobertura social a la plantilla, casi en un 80% formada por personas con discapacidad, se habilita un fondo extraordinario de 4 millones de euros para: anticipos de hasta 2.000 euros con devolución en 24 mensualidades a partir del final de la situación; y una ayuda especial automática de 800 euros en la nómina de mayo, a devolver en cuatro meses a partir de septiembre, sin intereses.
Se mantienen pagas extras y vacaciones completas
La negociación acuerda que los trabajadores mantengan sus derechos de generación de vacaciones y pagas extra durante la situación, lo que permite contar con el 100% de la “extra” de junio, sobre la que se permite solicitar anticipos. Los primeros días de abril se asignarán vacaciones y la empresa abonará también las retribuciones habituales.
Durante el tiempo que duren las medidas, que no podrán extenderse más allá del 30 de junio, quedan suspendidos todos los pagos y deudas que los trabajadores y trabajadoras tengan contraídos con la ONCE, de igual manera que se abonarán las ayudas por cargas familiares en la nómina del mes de abril.
Los consejeros generales, directivos y mandos intermedios tendrán una rebaja salarial del 30%. Se mantendrán activos, al 100% o al 70% los profesionales necesarios para mantener la acción social, como personal sanitario, trabajadores sociales, psicólogos, maestros y profesores, instructores tiflotécnicos y personal de los servicios de producción de recursos didácticos, entre otros necesarios para la gestión.
Representantes de los trabajadores y de la empresa constituirán una Comisión de Seguimiento conformada por un representante de cada sindicato y la dirección, para seguir analizando situaciones y valorando cualquier incidencia, como el arranque paulatino de la actividad cuando las circunstancias lo permitan.
Mirando al futuro
La Organización considera que estas medidas ayudan a superar las incertidumbres del futuro ligadas a la actual falta de ingresos, así como al efecto que los cambios sociales y el impacto económico y social de la crisis puedan generar en el retorno a la actividad, para el que la ONCE empieza ya a trabajar y diseñar escenarios que lo hagan más ágil.
Finalmente, muestra su agradecimiento a los representantes de los trabajadores y reitera su compromiso y esfuerzo para garantizar el futuro de la Institución, mantener los puestos de trabajo y asegurar la prestación de servicios sociales para personas ciegas y, con otra discapacidad, máximo en estos momentos tan necesarios.