La plantilla del Real Racing Club de Santander juega al fútbol, a ciegas, con la ONCE
Con motivo de la Semana del Grupo Social ONCE en Cantabria
Jugadores del Real Racing Club de Santander han conocido de cerca el fútbol a ciegas, durante una exhibición realizada en los Campos de Sport del Sardinero, con motivo de la celebración de la Semana del Grupo Social ONCE en Cantabria.
Ataviados con antifaces, los futbolistas verdiblancos Iñigo Vicente, Peque, Jeremy y Germán Fernández, vivieron por unos instantes el fútbol tal y como lo lo juegan aquellos que no pueden ver. Lanzamientos de penalti y alguna que otra jugada, todo a ciegas, para visibilizar que las personas con discapacidad visual también juegan al fútbol.
En esta exhibición, organizada por la ONCE en colaboración con la Federación Española de Deportes para Ciegos (FEDC), los jugadores del Racing han recibido las indicaciones de Julián Martín, técnico de fútbol de la ONCE, y de Youssef Elhachoumi, un futbolista ciego total.
Testigo de esta experiencia de fútbol a ciegas ha sido Pedro Corral, que fue futbolista del Racing, Real Madrid, portero menos goleado de Segunda División con el Málaga e incluso llegó a jugar la final de la extinta copa del Generalísimo con el Castellón. Actualmente Corral es afiliado a la ONCE.
¡Silencio, se juega!
Las personas ciegas y con discapacidad visual compiten en dos categorías distintas, existiendo grandes diferencias entre ambas.
Los jugadores con discapacidad visual (B2/B3) no necesitan apenas adaptaciones para poder competir. Estas adaptaciones van principalmente encaminadas a conseguir contraste entre el color del balón y el suelo, de la portería y el fondo y una iluminación de igual intensidad durante los 40 minutos de juego real que dura el partido. Por ello disputan sus partidos en pabellón cubierto.
Por otra parte, el fútbol para ciegos ha necesitado mayor número de adaptaciones, estando en estos momentos bien desarrollado y reglamentado, lo que lo convierte en un deporte seguro y viable para las personas ciegas.
Las características específicas imprescindibles son: balón sonoro; vallas laterales que evitan los fueras de banda, salvo que el balón salga por encima de éstas, siendo además un elemento de orientación y seguridad para el jugador; el portero es vidente y tiene limitada su maniobrabilidad a una pequeña zona dentro del área de penalti; un guía detrás de la portería orienta a los jugadores; y la obligatoriedad de los jugadores de decir, de forma clara y audible, la palabra “voy”, para evitar golpes y orientar al jugador rival.
Dadas las necesidades específicas esta modalidad se juega en campo de césped artificial descubierto para facilitar la audición del balón. Por eso es necesario el silencio del público mientras esté en juego la pelota y hasta que no se marque un gol o existan tiempos muertos.