Los judocas paralímpicos buscan en Tbilisi (Georgia) su clasificación para los Juegos de París
Último campeonato del ciclo paralímpico que se disputa los días 18 y 19 de mayo
Los judokas paralímpicos españoles disputan este fin de semana el Grand Prix de Tbilisi (Georgia), última prueba puntuable para conseguir la clasificación para los próximos Juegos de París.
Hasta la capital georgiana se ha desplazado el equipo de la Federación Española de Deportes para Ciegos, comandado por la técnica Marina Fernández, y los judocas Sergio Ibáñez, Daniel Gavilán, Marta Arce y María Manzanero. Están acompañados por los entrenadores Raúl Clemente y Javier Delgado, además de la fisioterapeuta Marta Moro.
La competición arrancará este sábado para Arce, Gavilán e Ibáñez, mientras que el domingo saltará al tatami la más joven del equipo, María Manzanero. El objetivo no es otro que conseguir los puntos necesarios que les aseguren el billete para los Juegos Paralímpicos.
Cabe destacar que en la última competición internacional disputada en Antalya (Turquía), el aragonés Sergio Ibáñez se colgó la medalla de plata mientras que la vallisoletana Marta Arce y la madrileña María Manzanero se hicieron con la presea de bronce, confirmando su buen estado de forma. Por su parte, el madrileño Daniel Gavilán no pudo pasar del primer combate si bien es el componente del equipo mejor situado de cara a los Juegos de la capital francesa.
El judo, un deporte con mínimas adaptaciones
El judo es uno de los deportes con menos modificaciones para personas ciegas y sólo es preciso que los combates se inicien con los dos deportistas agarrados. Si se sueltan, el árbitro para con el objetivo de que vuelvan a cogerse.
Actualmente, existen dos categorías de competición, J1 (ciegos) y J2 (discapacidad visual) con mínimas modificaciones entre ellas como el acceso con asistencia al tatami o en cuanto al indicativo de la vestimenta.
Con esta nueva normativa, aprobada tras los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020, los judokas J1 y J2 no compiten entre ellos a menos que no haya suficientes participantes, por lo que bajo mutuo acuerdo, pueden hacerlo.
Existen también, algunas otras modificaciones, relativas a la forma de transmitir por parte de los árbitros a los deportistas las señales, ya que no lo podrán hacer por gestos, tal y como se hace habitualmente. Además, en este deporte existe una alta participación de personas con sordoceguera, por lo que la forma de darles los avisos también está adaptada al tacto y recogida en el reglamento.