El derecho a un empleo inclusivo, a un salario justo o a unos servicios sociales de excelencia para las personas con discapacidad, son algunas de las reivindicaciones que han trasladado al comisario

El grupo de jóvenes españoles que ha viajado a Estrasburgo(se abrirá nueva ventana) para poner voz a los 80 millones de personas con discapacidad de la UE en el European Youth Event(se abrirá nueva ventana) (EYE), se ha reunido hoy, último día del evento, con Nicolas Schmit, comisario europeo de empleo y derechos sociales, para trasladarle sus inquietudes y reivindicaciones para que Europa sea más inclusiva, accesible y justa.

La reunión se ha celebrado en el marco de este evento que tiene como objetivo que los ciudadanos, en este caso los jóvenes europeos, den su opinión sobre cómo quieren que sea la Europa del presente y del futuro.

Los jóvenes españoles, ligados a la ONCE y el Cermi, han sido los encargados de poner sobre la mesa la necesidad de mejorar la accesibilidad e inclusión de la discapacidad en todos los ámbitos de la vida ciudadana, y han aprovechado el encuentro con Schmit para trasladarle propuestas e ideas de mejora para el empleo y los servicios sociales de los grupos más vulnerables.

Puntos clave para una Europa más justa e inclusiva

Garantizar un empleo justo e inclusivo para los jóvenes con discapacidad, y un salario digno ha sido una de las principales reivindicaciones del grupo español ante el comisario europeo.  Según han expuesto ante Schmit, la implementación efectiva del Plan de Acción del Pilar Europeo de Derechos Sociales (plan que establece veinte principios clave para una Unión Europea más justa) garantizaría la plena inclusión y accesibilidad de los jóvenes con discapacidad en los diferentes ámbitos de la vida.

De hecho, y tal y como han manifestado los jóvenes, el objetivo marcado por el Plan de Acción para 2030 es que al menos al 78% de las personas de entre 20 y 64 años tengan trabajo. Una meta que, según han explicado, no es viable si la tasa de actividad de las personas con discapacidad no llegue, como mínimo, al 50% en 2030.

Los jóvenes también han reivindicado unos servicios sociales y sanitarios de excelencia para las personas con discapacidad. Para que esto se cumpla, es necesario que la asistencia sanitaria de las personas con discapacidad sea de calidad, accesible e incluya la rehabilitación y la prevención en todos los países del continente.

Otro de los puntos clave que han destacado los españoles ante el comisario ha sido la necesidad de llevar a cabo una transición ecológica justa, que tenga en cuenta la inclusión y la discapacidad.

En este sentido, los jóvenes han manifestado la necesidad de que la Estrategia de Biodiversidad 2030 incluya la perspectiva de discapacidad en sus políticas, para que tenga en cuenta elementos como los coches eléctricos y silenciosos, los cuales ayudan al medio ambiente, pero representan un tremendo hándicap para las personas con discapacidad, en este caso visual, ya que no los pueden oír. Los patinetes eléctricos también han sido otro de los puntos comentados durante la reunión, ya que igual que los coches silenciosos, provocan problemas de movilidad a las personas con discapacidad cuando son estacionados en medio de la calle o las aceras.

Finalmente, también han querido reivindicar la lucha por la igualdad de género que proteja a las mujeres y niñas con discapacidad. Las mujeres con discapacidad constituyen el 16% de la población total de mujeres de la Unión Europea y afrontan una discriminación múltiple e interseccional en todos los ámbitos de la vida. En esta línea, los jóvenes han pedido, durante la reunión con el comisario y las realizadas con los eurodiputados, la garantía de que las instituciones europeas trabajen para que en sus nuevas políticas se refleje la realidad de las mujeres y niñas con discapacidad y se luche para acabar con las barreras que impiden su inclusión efectiva.

Tras la exposición de estos puntos, Nicolas Smith ha tomado la palabra para subrayar que lucha mucho “para que las personas con discapacidad se incorporen del mercado laboral”. En este sentido ha señalado que confía mucho en la economía social “aunque también debemos luchar para que sea toda la economía en general la que ayude a las personas con discapacidad”.

Con esta reunión, y a falta del acto de clausura, los jóvenes españoles ponen fin al EYE 2021, un evento que, sin duda, marcará un antes y un después en el trato de la discapacidad en Europa y que potenciará la elaboración de políticas inclusivas y accesibles para todos.