Once artistas ciegos muestran ‘ONCE formas de expresión’, en el Museo Tiflológico
Artistas de Madrid, Cataluña, Galicia, Castilla y León, La Rioja, País Vasco, Andalucía y Argentina exponen fotografía, pintura y escultura que puede verse y tocarse durante estas Navidades
‘ONCE formas de expresión’ es el título de la exposición colectiva en la que 11 artistas ciegos muestran cómo la ceguera no es un obstáculo para la creación artística. Fotografías, pinturas y esculturas podrán verse, y en muchos casos tocarse, del 2 de diciembre de 2016 al 14 de enero de 2017, en el Museo Tiflológico de la ONCE (calle de La Coruña, 18. Madrid), en horario de martes a viernes de 10 a 14 horas y de 17 a 20 horas; sábados de 10 a 14 horas; domingos, lunes y festivos: cerrado.
Las obras expuestas en esta muestra cuentan con los títulos en Braille y, además, están provistas de códigos QR, con información accesible a personas con ceguera o discapacidad visual a través de teléfonos móviles. Esta exposición es una interesante opción para el ocio en estas Navidades.
César Delgado expone ‘Salomé’, una escultura en bronce de 1998. Delgado, nacido en Madrid, en la etapa anterior a la ceguera su actividad artística se centraba en el óleo y el carbón. Al quedarse ciego, y con su formación en el Círculo de Bellas Artes (Talleres de Arte Actual), ensayó cómo desarrollar su creatividad hasta dar cuerpo a una forma de expresión artística singular.
Andrés Clariana trae al Tiflológico ‘Venus’, una escultura en madera de coral, de 1998. Nacido en Barcelona, en 1998 ingresa en la Escuela Masana de la Ciudad Condal, para estudiar escultura, donde realiza trabajos de modelado en moldes de escayola, diversas resinas y talla en madera y piedra. En 1991 estudia en la Escuela Carmen Muset, realizar estudios de pintura, trabajos en lápiz, carboncillo, pastel y óleo.
José María Prieto Lago muestra en esta exposición su obra ‘El Quijote’, una escultura en bronce, de 1995. El escultor sordociego Prieto Lago nace en Covas (Vivero-Lugo), realiza sus obras en talla de madera, para luego pasarlas a bronce.
Kelly Arrontes expone su visión de ‘Rossy de Palma’, en una pintura acrílica sobre madera (2016). La vallisoletana Kelly Arrontes retrata a personajes famosos en cuadros de gran formato. Para esta pintora, su discapacidad visual no es un obstáculo para sacar de cada personaje lo que ella quiere porque “cuando pinto personas, trato de adentrarme en su interior”, afirma.
Eduardo Matute ‘Dudu’, muestra al espectador su obra ‘Miguel Bosé’, una pintura acrílica sobre lienzo, de 2015. Nacido en Madrid, desde 1989 desarrolla el arte del graffiti. Entre 1994 y 1995, participa en la academia de pintura El Estudio 2, y en 2007 obtiene la beca de perfeccionamiento pictórico “Fermasam-Cajamadrid” del estudio de pintura “Decinti Villalón”. Ha realizado numerosos murales en locales comerciales de Madrid y Barcelona.
Marcelo Bilevich presenta a ‘Ana Oka’, una fotografía digital, de 2016. Interesado por la fotografía, su baja visión limitó el trabajo de Marcelo Bilevich (Argentina) en la fotografía analógica. En el año 2007, con la cámara digital todo cambió, ya que pudo controlar todo el proceso fotográfico. La afición de Bilevich por los deportes acuáticos le lleva a la fotografía bajo el agua.
Juan Torre, también fotógrafo, muestra a ‘Angel Unzu’, en una fotografía digital (2010). Juan Torre, nacido en Getxo (Bizkaia) comenzó su experiencia profesional como redactor gráfico en publicaciones como La Gaceta del Norte, Tribuna Vasca, o Diario 16. Sus fotografías son en relieve, para que puedan ser tocadas por personas ciegas.
Gregorio Martínez Ruiz ‘Goyo’ expone ‘Mi amigo Alfredo Caliz’, una fotografía digital de 2014. Nacido en Haro (La Rioja), es un autodidacta de la fotografía, afición que practica desde su juventud. Una vez superadas las dificultades visuales continuó realizando fotografía, para demostrar a otras personas ciegas las múltiples visiones accesibles de ciudades monumentales y paisajes en plena naturaleza.
Carme Ollé trae al Tiflológico ‘Nature Witness’, fotografía digital de 2014. Nacida en Barcelona, Carme Ollé aprendió en el laboratorio fotográfico de Can Sàbat el arte de la fotografía. El paisaje y la composición y el retrato configuraron inicialmente su trayectoria fotográfica. En la actualidad es el paisaje el objeto de su mirada.
Eulalia Conde expone ‘La Sala’. Un óleo sobre lienzo, de 1998. La sevillana Eulalia Conde desarrolla la pintura, la ilustración, el grabado y dibujo. Según sus propias palabras, pinta “con entera libertad, a veces lo que el lienzo en blanco me sugiere, otras aquello que me da la observación de lo que me rodea y en otras ocasiones las imágenes o ideas que se asoman a mi mente”.
Rafael Arias muestra ‘El Mendigo, oleo sobre lienzo de 2016. Arias, nacido en Madrid, fue dibujante y fotógrafo publicitario en empresas de publicidad, incluso su propia agencia, desde el año 1990 se inclina por la pintura al óleo. Utiliza pintura al óleo porque es una sustancia que, aplicada en cantidad y una vez seca, crea un relieve que permite seguir la composición y las formas individuales con el tacto.
El Museo Tiflológico de la ONCE
El Museo Tiflológico (http://museo.once.es) es un espacio accesible a todos los públicos, donde se emplean, como canales de entrada de la información, el tacto y el oído, junto al tradicional de la vista. En sus salas se muestran cuatro colecciones: la de maquetas de monumentos arquitectónicos, la de obras de artistas con discapacidad visual grave, la de material tiflológico y la de libros en braille y otros sistemas de escritura anteriores a la creación de la ONCE.
Se inauguró el 14 de diciembre de 1992 y es un espacio concebido para que sus visitantes puedan ver y tocar las piezas expuestas, aunque lo que realmente lo hace original y único es el hecho de ser un museo que nace por decisión de sus usuarios y diseñado por estos a la medida de sus necesidades. En él se exhibe el patrimonio cultural de la ONCE y se desarrollan los programas de exposiciones temporales de obras de artistas ciegos y de extensión museística a través de la exposición itinerante de sus fondos. En ambos casos el objetivo es promocionar y satisfacer las necesidades culturales de las personas con discapacidad visual grave, así como servir de escaparate a los esfuerzos de integración y normalización perseguidos por la ONCE.