Presentan un sistema de retención que permite a los perros guía subir en las ambulancias para acompañar a las personas ciegas
La colaboración de la ONCE Cataluña ha sido clave en la creación del protocolo de actuación, gracias al trabajo de campo con perros guía en la ambulancia
La consejera de Salud de la Generalitat de Cataluña, Alba Vergés; el gerente del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), Antoni Encinas; y la jefa del Departamento de Servicios Sociales para Afiliados de la ONCE en Cataluña, Dolors Luna, han presentado un sistema de retención que permite a los perros de asistencia, entre ellos los perros guía, subir a las ambulancias para acompañar al paciente.
Durante el acto se ha hecho una demostración de un caso en que una persona ciega, Anaïs García, ha ido acompañada de su perra guía, Cometa, en una unidad del SEM.
De este modo el SEM ha dado un paso más en su labor de sensibilización respecto a los pacientes que tienen alguna discapacidad, teniendo en cuenta en todo momento sus necesidades. Conjuntamente con ONCE Cataluña ha diseñado un procedimiento que permite, a partir de hoy, atender cualquier paciente con un perro de asistencia. De este modo, el perro podrá acompañar al paciente en la ambulancia durante su traslado al hospital.
El SEM ha contado con la colaboración de la ONCE a lo largo de un año en este proyecto. Ambas entidades han elaborado un protocolo de actuación, después de hacer el trabajo de campo con perros guía en la ambulancia y fijar la colocación y medidas de seguridad para los animales. Posteriormente, se ha comprobado el funcionamiento, hasta la supervisión final del protocolo con el fin de asegurar su correcto uso.
El acceso del perro al vehículo ya es posible en todas las ambulancias del SEM. Esta iniciativa lo hace pionero en ofrecer un tratamiento integral en el terreno de las emergencias médicas, y cuida tanto de la salud del usuario como de la integridad del perro. Con esta medida se quiere velar por la salud y el bienestar de los pacientes que tienen una discapacidad, haciendo posible que éstos no se separen de su perro cuando sean atendidos por los profesionales sanitarios y durante su traslado al hospital.
En la cabina asistencial, junto al paciente
El perro guía -siempre identificado con una placa que lo acredite - podrá acompañar al paciente en el interior de la cabina asistencial de la ambulancia, siempre que la asistencia sanitaria del paciente lo permita. Esta cabina cuenta con un sistema de sujeción que permite enganchar el arnés del perro al mecanismo de retención.
En el supuesto de que se decida hacer el traslado del animal en un Vehículo de Intervención Rápida (VIR) del SEM, que no dispone de espacio para la camilla, el perro se ubicará en la cabina de conducción gracias a un mecanismo de retención conectado al anclaje del cinturón de seguridad. El perro irá en el suelo, sobre una sábana de papel como medida de higiene, y no podrá subir al asiento con el fin de asegurar la seguridad durante el traslado. El sistema de retención reducirá la movilidad del perro, garantizará su seguridad en caso de colisión del vehículo, de una frenada brusca o de otras maniobras imprevistas, y también evitará interferencias en las tareas de conducción del vehículo.
Durante el traslado del paciente con el perro guía, la ambulancia informará a la Central de Coordinación Sanitaria (CECOS) del SEM y ésta alertará al servicio de seguridad del hospital receptor. Una vez allí, este servicio se hará cargo del control y la custodia del perro.
¿Qué perros pueden acceder a la ambulancia?
Hay 5 tipos de perros de asistencia, adiestrados y reconocidos para dar servicio a personas con alguna discapacidad visual, auditiva o física, o que tengan trastornos del espectro autista, diabetes y epilepsia, entre otros.
1. Perro guía, adiestrado para guiar a una persona ciega o con discapacidad visual grave.
2. Perro de servicio, adiestrado para proporcionar ayuda a personas con discapacidad física en su vida diaria.
3. Perro de señalización de sonidos, adiestrado para avisar a las personas con discapacidad auditiva de diferentes ruidos e indicarles su fuente de procedencia.
4. Perro de aviso, adiestrado para dar aviso ante señales de alerta para epilepsia, diabetes o cualquiera de las enfermedades para las que ha sido entrenado.
5. Perro para personas con trastornos del espectro autista, adiestrado para cuidar de su integridad física, guiarla y controlar las situaciones de emergencia que puedan acontecer.