Un grupo de personas ciegas afiliadas a la ONCE ha visitado esta mañana la Colección de SEAT, en la Zona Franca de Barcelona. Han podido tocar algunos tesoros de la historia automovilística española de la nave A-122, donde se encuentra la ‘Colección de Coches Históricos’, con 325 modelos fabricados en el último medio siglo. Entre ellos, el legendario 600 y el 1.430. También había clásicos, como el Panda o los modelos con nombres de ciudades, como el Toledo, el Ibiza o el León. Y el mítico prototipo Bocanegra.

La colección también muestra vehículos de las visitas oficiales de altos mandatarios, jefes de Estado y empresarios de la época a la antigua fábrica de SEAT. Por ejemplo, el Papamóvil que utilizó Juan Pablo II en su visita a España en 1982. Habitualmente un Mercedes, pero SEAT recibió el encargo de hacer un coche a medida para que el Papa pudiera acceder hasta el mismo césped de Camp Nou y del Santiago Bernabéu.

Un porcentaje elevado de los coches del museo tiene el motor en perfecto estado y 60 tienen matrícula para circular y participar en festivales de autos clásicos.

"En la ONCE promovemos museos que sean espacios accesibles para todos con un diseño universal. Nos encanta que además de ver, podamos escuchar y tocar. Que no haya barreras, ni arquitectónicas ni de comunicación, para tener el máximo de información. Las personas ciegas necesitamos un contacto directo con los objetos para facilitar su exploración y contenidos que permitan la máxima accesibilidad”, asegura Enric Botí, delegado territorial de ONCE Catalunya.

La ONCE considera el ocio y la cultura como un componente esencial de la experiencia humana, como un espacio creativo y público, con una dimensión inclusiva, donde todas las personas tienen cabida y se interrelacionan. E implica acciones educativas que garanticen un mayor disfrute y satisfacción.